La historia detrás de la legalización del PCE en España: ¿Cómo Carrillo llevó al rey a aprobarlo?

El Partido Comunista de España (PCE) fue fundado en 1921 y jugó un papel fundamental en la oposición al régimen franquista durante la dictadura. En los años de la transición a la democracia, el PCE se convirtió en un actor político relevante, formando parte de la coalición Unidad Popular en las elecciones de 1977. Sin embargo, aún no estaba legalizado y sus líderes seguían siendo perseguidos y encarcelados.

El papel de Carrillo en la legalización del PCE

Santiago Carrillo fue Secretario General del PCE durante 27 años, desde 1960 hasta 1982. Durante los primeros años de la transición se dedicó a negociar la legalización del partido con los líderes políticos de la época. En 1976, Carrillo regresó del exilio para liderar la apertura del partido hacia la socialdemocracia y la creación del Partido Comunista de España (PCE)-Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), que sería legalizado en 1977.

A pesar de ello, el PCE seguía siendo ilegal y Carrillo se enfrentó a la disidencia de algunos sectores del partido que preferían mantenerse en la clandestinidad. Finalmente, en abril de 1977, Carrillo tomó una decisión histórica al presentar una solicitud de legalización del PCE al Ministerio del Interior.

El discurso de Carrillo ante los medios de comunicación

En su primer discurso público tras la solicitud de legalización del PCE, Carrillo afirmó que “sin el PCE, el proceso democrático en España estaría incompleto, y por eso lo reclamamos con legítimo derecho”. El líder comunista señaló que la apertura del partido hacia el socialismo democrático y su compromiso con la lucha política dentro del marco constitucional eran las razones por las que debía legalizarse el PCE.

La legalización del PCE y la monarquía

La legalización del PCE fue uno de los principales hitos de la transición española a la democracia y significó el fin de la persecución política a uno de los partidos más importantes de la historia de España. No obstante, algunos sectores políticos y mediáticos de la época mostraron su preocupación por las implicaciones que tenía la legalización del PCE para la estabilidad política del país.

En este contexto, resulta significativo el gesto del rey Juan Carlos I, quien llamó personalmente al líder comunista para felicitarle por la legalización del partido. Según Carrillo, el rey le dijo: “Quiero que sepa que, como jefe de Estado de todos los españoles, me alegro de que se haya hecho justicia con su partido”.

El papel del PCE en la consolidación democrática

Desde su legalización, el PCE se convirtió en un actor político relevante en la España democrática. En las primeras elecciones generales tras la dictadura, celebradas en 1979, el PCE obtuvo un 9,4% de los votos y 20 diputados en el Congreso de los Diputados. En 1982, el PCE se integró en la coalición electoral Izquierda Unida, junto a otras fuerzas políticas de la izquierda española. En las elecciones de ese año, la coalición obtuvo un 4,6% de los votos y 7 diputados.

En la actualidad, el PCE sigue existiendo como partido político y forma parte de la coalición Unidas Podemos, que participa en el gobierno de coalición con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). La legalización del PCE en 1977 fue un hito fundamental en la consolidación democrática de España y en la normalización de la presencia de una fuerza política que había sido perseguida y reprimida durante más de cuatro décadas.

Conclusiones

La legalización del PCE en 1977 fue un paso crucial en la transición española a la democracia y en la normalización política de un partido histórico que había sido perseguido y encarcelado durante décadas. El papel de Santiago Carrillo en este proceso fue fundamental, ya que supo negociar y llevar a cabo una estrategia de apertura y modernización del partido sin perder de vista sus principios ideológicos y sin renunciar a la lucha política en el marco constitucional.

La legalización del PCE tuvo una gran significación política y simbólica, ya que demostró la capacidad de la democracia para integrar y reconocer a una fuerza política que había sido considerada ilegal durante tanto tiempo. El gesto del rey Juan Carlos I mostró que la legalización del PCE era un paso fundamental para la consolidación de la democracia y para la normalización de la presencia de una fuerza política que había sido perseguida y reprimida durante tantos años.

• Partido Comunista de España (PCE)
• Unidad Popular
• Partido Comunista de España (PCE)-Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC)
• Izquierda Unida
• Unidas Podemos