Cómo legalizar una construcción antigua: todo lo que necesitas saber para hacerlo según la normativa actual

Las construcciones antiguas son parte importante de nuestra historia y cultura. Sin embargo, al momento de querer vender, remozar o ampliar una propiedad que no cuenta con los permisos necesarios, se presentan varios problemas. En este artículo te explicaremos cómo legalizar una construcción antigua.

¿Qué es una construcción antigua?

Una construcción antigua es aquella que no cuenta con las autorizaciones necesarias, ya sea porque fue construida antes de la existencia de normativas urbanas o porque se hicieron ampliaciones o reformas sin permiso. En muchos casos, estas construcciones pueden ser patrimonio cultural o histórico de una región.

¿Por qué legalizar una construcción antigua?

Legalizar una construcción antigua es importante para evitar problemas legales y sanciones. Además, la habitabilidad de la propiedad puede mejorar gracias a las adecuaciones que se deben hacer para obtener los permisos.

¿Cómo legalizar una construcción antigua?

El proceso para legalizar una construcción antigua puede variar dependiendo del país o la región, sin embargo, algunos pasos generales pueden ser los siguientes:

1. Realizar una evaluación técnica

Se debe contratar a un arquitecto o ingeniero civil para que realice una evaluación de la construcción. Esto incluye un estudio de los materiales, cimientos, instalaciones eléctricas y de agua, entre otros aspectos. Con esto, se podrá determinar si la construcción es segura y cumple con las normativas actuales.

2. Obtener los permisos necesarios

Una vez que se tiene la evaluación técnica, se deben obtener los permisos necesarios para la legalización de la construcción. Esto puede incluir trámites en la municipalidad, ministerio de obras públicas y/o patrimonio cultural, dependiendo del caso.

3. Hacer las adecuaciones necesarias

En muchos casos, se deben hacer adecuaciones en la construcción para que cumpla con las normativas actuales. Esto incluye cambios en la estructura, instalaciones eléctricas y de agua, entre otros aspectos. Estas adecuaciones deben ser realizadas por profesionales calificados y certificados.

Conclusión

Legalizar una construcción antigua puede ser un proceso complejo y costoso, pero es importante para evitar problemas legales y sanciones. Además, el proceso puede mejorar la habitabilidad de la propiedad y preservar su valor histórico y cultural. Recuerda siempre contratar a profesionales calificados y certificados para realizar las adecuaciones necesarias.