Los intentos de legalización de la gestación subrogada en España: Avances y Desafíos
La gestación subrogada, también conocida como “vientre de alquiler”, es un proceso reproductivo en el que una mujer acepta llevar a un bebé para otra persona o pareja, que luego lo adoptará o lo registrará como propio. En España, esta práctica suele ser ilegal o está en una especie de limbo legal. Sin embargo, en los últimos años, ha habido varios intentos de legalización de la gestación subrogada en España, que han generado mucha controversia y opinión en contra y a favor. En este artículo, como un experto abogado, quiero analizar los argumentos y las implicaciones de estos intentos de legalización.
El contexto de los intentos de legalización
En España, el Código Civil establece que la gestación subrogada es nula de pleno derecho. Sin embargo, hay muchos casos de personas que han recurrido a esta práctica en el extranjero y luego han intentado registrar al bebé como propio en España. La jurisprudencia ha sido contradictoria al respecto, ya que algunos tribunales han aceptado la inscripción del bebé, mientras que otros la han denegado. Además, hay varios informes y estudios que indican que la gestación subrogada es una realidad en España, aunque se suela hacer a través de intermediarios o empresas extranjeras.
Ante este contexto, ha habido varios intentos para legalizar la gestación subrogada en España. En el año 2017, el partido Ciudadanos presentó una propuesta de ley para regular la gestación subrogada, basada en el llamado “modelo canadiense”. Esta propuesta fue apoyada por algunos colectivos feministas y LGTBI, que la consideran una forma de ampliar los derechos reproductivos y de la diversidad familiar. Sin embargo, también fue criticada por otros colectivos feministas y por algunos partidos políticos, que la consideran una forma de explotación de la mujer y de mercantilización del cuerpo humano.
Los argumentos a favor y en contra de la legalización
Como experto abogado, considero que hay argumentos sólidos tanto a favor como en contra de la legalización de la gestación subrogada en España. A continuación, quiero analizar cada uno de ellos.
Argumentos a favor
- Ampliación de los derechos reproductivos: La legalización de la gestación subrogada podría garantizar el derecho de todas las personas a tener hijos, sin importar su orientación sexual o su capacidad gestante.
- Protección de las personas gestantes y de los bebés: La legalización permitiría establecer unas normas claras y unos controles médicos y psicológicos rigurosos para proteger la salud y los derechos de las personas gestantes y de los bebés.
- Regulación de la intermediación y compensación económica: La legalización permitiría establecer unos requisitos éticos y legales para la intermediación, así como fijar unas compensaciones justas y claras para las personas gestantes.
Argumentos en contra
- Explotación y mercantilización del cuerpo humano: La legalización de la gestación subrogada podría fomentar la venta y el uso del cuerpo humano como mercancía, y podría llevar a la explotación de mujeres pobres y vulnerables.
- Impacto psicológico en las personas gestantes y en los bebés: La gestación subrogada podría tener efectos psicológicos negativos en las personas gestantes, que podrían sentirse despersonalizadas y sufrir una pérdida de vínculo emocional con el bebé. Además, los bebés podrían tener problemas de identidad y de relación con su familia biológica y su familia de acogida.
- Desigualdades entre las personas que pueden permitirse la gestación subrogada y las que no: La legalización de la gestación subrogada podría perpetuar las desigualdades sociales y económicas, ya que solo las personas más ricas podrían permitirse el coste de esta práctica.
Las perspectivas de futuro de la gestación subrogada en España
Como experto abogado, considero que la gestación subrogada siempre será una práctica controvertida y debatida en España y en el mundo. Sin embargo, creo que las perspectivas de futuro de la gestación subrogada en España dependerán de varios factores:
- La evolución de las normativas internacionales y europeas sobre la gestación subrogada.
- El avance de las técnicas de reproducción asistida y de la medicina regenerativa, que podrían permitir la gestación artificial de embriones sin necesidad de una persona gestante.
- El consenso social y político sobre el valor de los derechos reproductivos y la dignidad humana frente a la mercantilización del cuerpo.
En cualquier caso, creo que es necesario seguir debatiendo y analizando los argumentos y las implicaciones de los intentos de legalización de la gestación subrogada en España, para poder garantizar la protección de los derechos y la dignidad de todas las personas implicadas.
