Todo lo que debes saber: La diferencia entre legalizar y apostillar tus documentos” – Guía completa para entender los trámites legales en el extranjero

Como abogado, a menudo me han preguntado sobre la diferencia entre legalizar y compulsar. Ambos términos son importantes en el ámbito legal y pueden ser un poco confusos para personas que no están familiarizadas con ellos. En este artículo, te explicaré de forma clara y concisa la diferencia entre legalizar y compulsar, para que puedas entender cuándo y cómo deben ser utilizados cada uno.

Legalizar documentos

Legalizar un documento se refiere a obtener, mediante una serie de trámites, una apostilla que autentique su validez y autenticidad en el extranjero, es decir, que sea reconocido como legal en otro país.

La apostilla es un trámite que se realiza en la Haya (Países Bajos) y puede ser exigida para documentos como títulos académicos, certificados de matrimonio, de nacimiento, defunción, entre otros. Con esta apostilla, un documento se considera legal y auténtico en el extranjero sin necesidad de realizar más trámites.

Compulsar documentos

Compulsar un documento es el proceso de verificar que el documento es auténtico y que coincide con el original. Por lo general, esto se hace mediante la realización de una copia certificada del documento, que se considera igualmente auténtica al original.

Este proceso es importante para garantizar que los documentos presentados en un juicio o trámite legal son auténticos y no están falsificados. Es necesario compulsar documentos como certificados de nacimiento, de matrimonio, de defunción, poderes, contratos y otros documentos legales.

¿Cuándo se debe legalizar o compulsar un documento?

La decisión de legalizar o compulsar un documento depende del propósito para el cual se requiere el documento y del país donde será utilizado. Si un documento necesita ser utilizado en el extranjero, es probable que necesite legalización mediante la apostilla. Por otro lado, si un documento se presentará en un juicio o trámite legal, es posible que deba ser compulsado para verificar su autenticidad.

Algunos ejemplos:

• Un estudiante que desea estudiar en el extranjero debe legalizar su título universitario.
• Un ciudadano que necesita presentar un documento en una corte, probablemente deba compulsarlo.
• Una empresa que quiere abrir una filial en otro país puede necesitar legalizar algunos documentos de la empresa.

Conclusión

En resumen, la diferencia entre legalizar y compulsar es clara. Legalizar se refiere a autenticar un documento para su uso en el extranjero a través de la apostilla de la Haya, mientras que compulsar es el proceso para garantizar que un documento es auténtico y está en orden. La elección de uno u otro dependerá del propósito del documento y del país donde se utilizará.

Es importante mencionar que estos trámites pueden ser un poco complejos y variar según el país y el tipo de documento en cuestión, por lo que es recomendable buscar asesoría legal para llevar a cabo estos procedimientos correctamente.