Todo lo que debes saber para legalizar la instalación de aire comprimido en tu empresa: guía completa 2021
En la actualidad, cada vez es más común la utilización de aire comprimido en distintos ámbitos, tanto industriales como en la vida cotidiana. Su uso resulta muy útil para muchas tareas, como la limpieza y el secado de superficies, el inflado de ruedas o de objetos inflables, e incluso para la producción de energía mecánica.
¿Qué es el aire comprimido?
El aire comprimido es una forma de energía que se obtiene al comprimir el aire atmosférico. Para ello, se utilizan compresores que transforman la energía eléctrica en energía cinética, la cual comprime el aire y lo almacena en un depósito. Este aire comprimido puede ser utilizado de diversas formas, dependiendo de las necesidades de cada situación.
Legalidad de la Instalación de Aire Comprimido
La instalación de un sistema de aire comprimido en un establecimiento o empresa debe cumplir con una serie de normas y regulaciones. Por ello, es necesario contar con la asesoría de abogados especializados en derecho administrativo y regulatorio para asegurarse de cumplir con las normativas establecidas por las autoridades competentes.
Normas y Regulaciones
En México, las normas y regulaciones que aplican a la instalación de sistemas de aire comprimido son aquellas establecidas por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, la Secretaría de Energía y la Procuraduría de Protección al Ambiente. Además, también existen regulaciones específicas para cada estado, por lo que es necesario revisar las leyes locales.
Requisitos para la Legalización
Para legalizar la instalación de un sistema de aire comprimido, es necesario cumplir con los siguientes requisitos:
- Realizar estudios previos de impacto ambiental y de seguridad industrial para determinar los riesgos y la vulnerabilidad del sistema.
- Cumplir con las normas establecidas en materia de seguridad e higiene, como la NOM-002-STPS-2010.
- Contar con un sistema de mantenimiento preventivo y correctivo para garantizar el buen funcionamiento del equipo.
- Registrar la instalación del equipo ante las autoridades competentes y llevar un control de inspecciones periódicas y de mantenimiento.
Conclusión
La instalación de un sistema de aire comprimido debe hacerse respetando las normas y regulaciones establecidas para proteger la seguridad de los trabajadores y del medio ambiente. En caso de incumplimiento de dichas normativas, podrían ser sancionados tanto el propietario del equipo como la empresa a la que pertenece. Por esta razón, es importante contar con la asesoría de un abogado especializado en derecho administrativo y regulatorio para garantizar la legalidad de la instalación de un sistema de aire comprimido.