La legalización del vientre de alquiler: ¿Qué dicen las leyes y cómo afecta a las familias? – Blog de Legalizaciones

Desde hace algunos años, en nuestro país se ha generado un debate intenso en torno a la legalización del vientre de alquiler. Esta práctica consiste en que una mujer gestante lleva a término el embarazo de una persona o pareja, con el fin de ceder la filiación del niño o niña a los comitentes, quienes pagan por el servicio.

¿Qué es el vientre de alquiler?

Antes de profundizar en las implicaciones legales y sociales de esta práctica, es importante definir qué entendemos por vientre de alquiler o gestación subrogada. Según la resolución 2015/23 del Consejo de Europa, se trata de una técnica de reproducción asistida por la que una mujer lleva a término un embarazo con la intención de ceder el cuidado y la filiación del niño a otra persona o pareja. A su vez, esta práctica se dividiría en dos modalidades: la gestación subrogada tradicional o parcial, en la que se utiliza el propio óvulo de la gestante, y la gestación subrogada de sustitución o total, en la que el óvulo fertilizado se implanta en el útero de la gestante.

¿Es legal el vientre de alquiler en España?

En nuestro país, el vientre de alquiler es considerado ilegal. La Ley de Técnicas de Reproducción Humana Asistida prohíbe expresamente esta práctica en nuestro territorio, con el argumento de que supone una explotación del cuerpo de la mujer y una mercantilización del cuerpo humano. Además, la gestación subrogada puede llevar a situaciones de vulneración de los derechos de los niños y de los intereses de la gestante y de la pareja comitente.

Argumentos a favor y en contra de la legalización del vientre de alquiler

Argumentos a favor

  • El derecho a la libertad reproductiva, entendida como la posibilidad de cada persona de elegir cómo y cuándo tener hijos.
  • La solidaridad con las parejas heterosexuales e homosexuales que no pueden tener hijos biológicos y recurren a la gestación subrogada.
  • La introducción de un control sanitario y legal en la práctica, evitando situaciones de explotación y abuso de los derechos de las partes involucradas.

Argumentos en contra

  • El riesgo de que la gestante sea sometida a una presión económica y social para aceptar el acuerdo de gestación subrogada.
  • La posible tráfico de mujeres y niños para satisfacer la demanda de gestantes y parejas comitentes.
  • La incompatibilidad de la gestación subrogada con el enfoque de los derechos humanos, que reconoce la dignidad y la autonomía de todas las personas.

¿Cómo se regulan en otros países?

La regulación de la gestación subrogada varía según el país en que nos encontremos. Algunos países, como Estados Unidos, la permiten en determinados estados, mientras que otros, como Francia o Italia, la prohíben o la persiguen penalmente. En algunos países, como Reino Unido o Canadá, la gestación subrogada es legal siempre que no exista una transacción comercial de por medio.

Conclusión

En definitiva, la legalización del vientre de alquiler es un tema polémico y complejo, que requiere un debate profundo y riguroso para poder establecer una política pública coherente y justa. En cualquier caso, es importante tener en cuenta las implicaciones éticas, sociales y legales que esta práctica conlleva, y sopesar cuidadosamente las consecuencias que su legalización puede tener para las mujeres, los niños y las parejas comitentes.

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